miércoles, 5 de febrero de 2014

MANIFIESTO POR LOS DERECHOS SOCIALES


MANIFIESTO POR LOS DERECHOS SOCIALES

Con este manifiesto las instituciones y movimientos eclesiales de Madrid del colectivo “Evangelio, Justicia y Derechos sociales” católicas/os de Madrid, levantamos nuestra voz por la defensa de los derechos sociales y contra el creciente deterioro de las condiciones de trabajo y el saqueo de los servicios públicos, que los ciudadanos venimos sufriendo en los últimos tiempos. Queremos unir nuestra voz a la de todas aquellas personas y colectivos que están luchando por mantener y acrecentar estos derechos sociales y económicos propios del Estado social y democrático. Los consideramos como condiciones necesarias para que la dignidad de la persona humana pueda realizarse en la vida de cada día.


A.- UN CAMBIO DE MODELO SOCIAL


Ya antes de esta crisis que padecemos, en los últimos treinta años, la capacidad adquisitiva de los salarios ha disminuido respecto al crecimiento del nivel de vida y de los beneficios del capital. Lo que ha obligado a endeudarse a la mayoría de la población para hacer frente a necesidades elementales como la de la vivienda, que ha supuesto el gran negocio de las entidades financieras e inmobiliarias.


En el origen de la crisis actual está la desregulación de las prácticas financieras que han alentado unas inversiones de carácter especulativo. Cada vez más capitales se han dedicado a esta inversión especulativa y se han retirado de la economía productiva ya que ésta no les proporcionaba beneficios tan altos ni tan rápidos. Esto, especialmente en España, ha alimentado la burbuja financiero-inmobiliaria, que ha producido beneficios fabulosos a estos sectores, pero ha desarticulado las bases de una sana economía productiva.


Las políticas de los Tratados de la U.E. nos han llevado a aumentar la deuda de tal manera que nos cambiaron la Constitución Española en el tiempo record de una semana de verano para definir como objetivo prioritario de los presupuestos del Estado, el pago de deuda a los acreedores por encima de todas las demás necesidades. Todas estas medidas están originando la degradación de los derechos sociales.


Las ayudas públicas milmillonarias a los bancos y Cajas por estar en una situación financiera muy débil no revierten fundamentalmente en ayudas para reactivar la economía productiva, sino para seguir especulando con la misma deuda pública que se los proporciona. Los fondos financiados por el Banco Central Europeo al 1 % son comprados por las entidades financieras privadas y revendidas hasta al 6 %.


Con esta misma finalidad se decide una subida de impuestos que carga particularmente sobre los trabajadores, mientras se permite una fiscalidad llena de privilegios y de ingenierías deshonestas, el fraude y la evasión fiscal para las grandes fortunas.


No hay otra forma – dicen - de recuperar la confianza de los mercados de los que depende la financiación de nuestro gasto público... Nosotros, sin embargo, pensamos – con muchos economistas - que las causas de la crisis son otras y, consecuentemente, son otras también las medidas para salir de ella respetando la dignidad de las personas.


Ante los recortes sociales, Consideramos, que, más allá de lo que se nos presenta como medidas técnicas e inevitables para salir de la crisis, los poderes económicos están consiguiendo imponer a los gobiernos un cambio de modelo socio-económico al servicio de sus intereses.
 Modelo en el que lo comunitario y la solidaridad van siendo sacrificadas para que algunos, cada vez menos, obtengan altos beneficios. Recientemente lo decía el papa Francisco: “Al tiempo que los ingresos de una minoría van creciendo de manera exponencial, los de la mayoría van disminuyendo.”


PREGUNTAS PARA LA REFLEXIÓN Y EL TRABAJO EN GRUPO

  • ¿Qué opinas de que la causa de los recortes sociales está en que la crisis económica privatiza los beneficios y socializa las pérdidas? Razones a favor o en contra.
  • ¿Qué opinas de esta frase: hay más dinero para refinanciar a los Bancos y las Cajas, que para las pequeñas empresas, autónomos y familias?
  • ¿Qué opinas de que la única manera de resolver la crisis es recortando en sanidad, en jubilaciones, en educación, en vivienda…?

B.-“¡EL DINERO DEBE SERVIR Y NO GOBERNAR!”


El anterior modelo socio-económico comporta una determinada visión de la persona humana y de la vida en sociedad, una antropología y una ética inhumana e injusta para los más débiles. Por nuestra parte, partiendo de estos análisis y de la doctrina social de la Iglesia, ofrecemos algunas propuestas en defensa de los derechos sociales:


1.- La primacía de la persona humana: “La crisis financiera se basa en la negación de la primacía del hombre" Hemos creado nuevos ídolos. El antiguo culto al becerro de oro ha encontrado una imagen nueva y despiadada en el fetichismo del dinero y en la dictadura de la economía sin rostro ni objetivo verdaderamente humano... Sería conveniente realizar una reforma económica y financiera que fuera ética, en favor del hombre ”(Papa Francisco )”.


2.- La perversión del sistema: Juan Pablo II habla de las "estructuras de pecado" como "mecanismos perversos económicos, financieros y sociales que generan y mantienen las situaciones de desigualdad” En consecuencia, recuerda son precisas transformaciones de las estructuras socio-económicas y políticas. (S.R.S. 36)

Esta valoración nos invita a ser lúcidos ante la situación y emprender las transformaciones estructurales que sean precisas, enfrentarse a la intimidación y a la manipulación de la desinformación y el miedo, ante los ataques con los que los “mercados” destruyen los derechos de los ciudadanos.


3.- La formación de la opinión pública: En cuanto a la opinión pública dice el Concilio “Una participación ciudadana digna es impensable sin el conocimiento de los problemas de la comunidad política, de los datos de hecho y de las varias propuestas de solución” (“Compendio de Doctrina Social de la Iglesia”, nº 414)

Creemos, por ello, fundamental una información sobre las distintas alternativas económicas, para que los ciudadanos podamos tener elementos de juicio. Lo que supone ofrecer otra percepción de la realidad y otros criterios que los que unilateralmente nos ofrecen muchos medios de comunicación, incluidos los de la Iglesia, en manos de los mismos sectores sociales responsables de la situación.


4.- La función social de la propiedad: “Es necesario recordar aquel principio peculiar de la doctrina cristiana: los bienes de este mundo están originariamente destinados todos. El derecho a la propiedad privada es válido y necesario, pero no anula el valor de tal principio. En efecto, sobre ella grava "una hipoteca social… La tradición cristiana nunca ha reconocido el derecho a la propiedad privada como derecho absoluto e intocable: Este principio no se opone al derecho de propiedad, sino que indica la necesidad de reglamentarlo. ” (S.R.S. 42)

En consecuencia, el sistema tributario ha de promover una fiscalidad justa y equitativa que haga realidad el mandato constitucional. Y el Estado ha de vigilar para que las disposiciones jurídicas que la concretan y la permisividad ante el fraude fiscal no lo conviertan en papel mojado.


5.- El Estado al servicio del bien común: Ante la nueva ofensiva del capitalismo que “sataniza” la participación del Estado en la economía, dice Juan Pablo II: “Es deber del Estado proveer a la defensa y tutela de los bienes colectivos, cuya salvaguardia no puede estar asegurada por los simples mecanismos de mercado. Hay exigencias humanas importantes que escapan a su lógica; hay bienes que, por su naturaleza, no se pueden ni se deben vender o comprar: los créditos, la distribución del agua potable, la vivienda, la asistencia sanitaria, la instrucción, los medios de transporte y de comunicaciones, los seguros sociales del crecimiento de las familias, de suerte tal que nunca les falte lo necesario para una vida digna”, (CA 40, 47).


6.- Por la gravedad de la situación, insistimos en que ha de reconocerse el derecho a la vivienda como Derecho Humano (Declaración Universal de Derechos Humanos, art. 25; Convenio Europeo Derechos Humanos, art. 8). Y no tratarla como un mero objeto de tráfico mercantil, un bien que puede ser embargado para satisfacer el crédito del prestamista. En este sentido, la creación de un parque público de viviendas, el alquiler social y otras medidas similares, deberían servir para facilitar el acceso a una vivienda a las capas sociales con dificultades.


7.- El sistema financiero al servicio de la economía real: “Necesitamos un corpus mínimo de reglas necesarias para la gestión del mercado financiero global, que ha crecido mucho más rápidamente que la «economía real». Es necesario recuperar la primacía de la política – responsable del bien común – sobre la economía y las finanzas. Para que sean capaces de responder a las exigencias del bien común” (Pontificio Consejo Justicia y Paz, “Por una reforma del sistema financiero”, 2008)

Hay que someter a las finanzas a los principios de responsabilidad social y transparencia. Regular la actividad financiera para que los bancos recuperen su función principal: proporcionar crédito al Estado, a empresas y familias, para volver a una senda de crecimiento y creación de empleo.

Hay que recuperar las estructuras de una banca pública bajo control social, que pueda competir y presionar eficazmente a la banca privada para que el sistema financiero en su conjunto asegure la financiación de la economía.

Apoyamos a los sectores sociales que proponen realizar una auditoría de la deuda. Tal como existe, la deuda es impagable e injusta; no se puede liquidar a un país para liquidar una deuda.


PREGUNTAS PARA LA REFLEXIÓN Y EL TRABAJO EN GRUPO

  • ¿Qué opinas de la frase del Papa Francisco: “La crisis financiera se basa en la negación de la primacía del hombre" Hemos creado nuevos ídolos. El antiguo culto al becerro de oro ha encontrado una imagen nueva y despiadada en el fetichismo del dinero y en la dictadura de la economía sin rostro ni objetivo verdaderamente humano... Sería conveniente realizar una reforma económica y financiera que fuera ética, en favor del hombre ”
  • ¿Crees que se dan hoy mecanismos perversos económicos, financieros y sociales que generan y mantienen situaciones de desigualdad, a los que podemos llamar “estructuras de pecado” (S.R.S. 36)?
  • ¿Qué opinas de que “la tradición cristiana nunca ha reconocido el derecho a la propiedad privada como derecho absoluto e intocable “ (S.R.S. 42). Por eso el Estado debe vigilar el fraude fiscal para poder cubrir los derechos sociales de manera que nunca falte lo necesario para una vida digna (C.A. 40, 47)?
  • ¿Qué acciones propones hacer en el interior de la comunidad eclesial?
  • ¿Qué acciones propones para colaborar con las instituciones civiles?